Existen muchos hábitos saludable que te ayudarán a proteger sistema inmune, entre ellos se encuentran la alimentación correcta, el hacer ejercicio constante, dormir bien, consumir probióticos y sonreír para controlar el estrés. En el caso de los probióticos, estos sirven y han demostrado en diversos estudios que cuando se consumen diariamente y se practica un estilo de vida saludable, pueden ayudar a fortalecer y estimular a nuestro sistema de defensas.
El lactobacillus casei shirota es una bacteria probiótica que ha demostrado científicamente aumenta la actividad de las células natural killer (NK), que son parte importante de nuestro sistema inmune, además incrementan la inmunoglobulina A (primera línea de defensa que previene el daño por virus o bacterías). En adultos mayores, atletas y personas con estrés, la actividad de las células NK puede ser baja, por lo que es importante mantener su acción consumiendo probióticos.